10 febrero, 2021

Que nadie te diga lo contrario

Estas Navidades tuve que ir al médico. Me estaba tratando de unos problemas digestivos y con las comidas de estas fechas, se me agrabaron un poco y empecé a estar incómoda porque no estaba disfrutando de las comidas. Estaba preocupada porque llevaba días que no sentía hambre. Comía, sí, pero cada vez me costaba más y lo hacía por inercia. Y a mí me gusta comer, me gusta disfrutar de esos momentos en familia en la mesa. ¡Bastantes momentos me perdí estando enferma!

 

Como estaba en casa de mis padres, no podía ir a mi médico de cabecera y tuve que acudir a uno diferente. Todo fue normal al principio, me dijo que tomando algo más de fibra se me activarían los movimientos intestinales y se me aliviarían los síntomas. Pero todo se torció cuando se le ocurrió hacerme el historial médico.

 

“¿Has tenido anorexia y bulimia? ¿Y por qué no has empezado por ahí primero? ¡Claro, lo que a ti te pasa es que estás recayendo y por eso dices que no puedes comer!¡Las anoréxicas y bulímicas lo sois para toda vuestra vida!”

 

La tensión que se generó en el ambiente en ese momento creo que se pudo notar en todo el edificio.

 

Primero, yo no soy o he sido anoréxica y bulímica, ni yo ni nadie. Las personas podemos sufrir, padecer, un TCA, pero NO SOMOS UN TCA.

 

Y segundo, ¿alguien me explica como un profesional de la salud puede ir diciendo tan a la ligera que los TCA no se curan nunca? Yo porque estoy recuperada a día de hoy y sé que lo que dice es mentira, pero ¿y si le dices estas palabras a una persona que está luchando por salir? La hundes.

 

Salí de la consulta enfadada, pero a la vez con más ganas de luchar por la visibilidad de los TCA. Porque no puede ser que haya esa ignorancia dentro del sector sanitario a día de hoy. No puede ser que te etiqueten como “anoréxica”, “bulímica”… y utilicen esa parte de tu historia para hacerte un diagnóstico.

 

Porque las palabras de ese médico no son ciertas. Si estás luchando contra estas enfermedades, quiero que sepas que sí es posible curarse y volver a tener una vida normal. No permitas que nadie te diga lo contrario.

Leire

@yotambienquisesercomoanaymia